La Federación Internacional de Automovilismo ha enviado un comunicado a todos los equipos en el que se explica que declarará ilegal cualquier sistema de control de altura en las suspensiones de los monoplazas, sea cual sea su naturaleza. Según la Federación Internacional de Automovilismo, "Cualquier sistema o procedimiento que tenga como propósito o efecto cambiar la puesta a punto de la suspensión de un monoplaza mientras está en el parque cerrado, puede contravenir el artículo 34.5". De nuevo, la controversia técnica ha llegado a la F1. Porque a pesar de que la FIA no vió necesario penalizar a Red Bull, algunos equipos sospechan que la escudería es capaz de regular la altura del RB6 entre la calificación y la carrera con un ingenioso sistema de gas comprimido que se drenaría durante la estancia del monoplaza en el parque cerrado. Técnicos de Mclaren y Mercedes han admitido tener sospechas sobre la utilización de este sistema en el dominante monoplaza diseñado por Adrian Newey. "No puedo recordar exactamente el artículo, pero no se permite realizar cambios en la suspensión entre la calificación y la carrera", explicaba Ross Brawn, jefe del equipo Mercedes. Sin embargo, podría darse el caso de que Red Bull hubiese interpretado las normas más hábilmente que el resto ya que pasó la inspección de la FIA en Malasia. El equipo de Christian Horner podría haber encontrado el modo de hacerlo sin la necesidad de un sistema mecánico. De todos modos, la FIA avisa: "Creemos que cualquier sistema de amortiguación autonivelable pueda ir en contra del artículo 3.15 del reglamento técnico", añade el comunicado.
Por el momento, Mclaren ha dado a entender que tienen preparado un sistema parecido al de Red Bull para el próximo Gran Premio en China, a lo que Red Bull ha respondido con que serán denunciados por violar una de las reglas del deporte. El lío está en marcha.
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